Agentes de la División de Investigación Criminal
(Divincri) de la Policía Nacional del
Cusco detuvieron a Amadeo Soria Antezana (27), acusado de robar un millón cien mil soles que se hallaban en la
bóveda de seguridad de la cooperativa de ahorro y crédito Los Andes con sede en de la ciudad del Cusco.
El operativo para la detención del sujeto se registró tras la visualización de los videos
de los sistemas de videovigilancia de los exteriores del local, ubicado en la
calle Primavera del distrito de Wanchaq, en los que se aprecia que Amadeo Soria Antezana sale del local de la entidad financiera llevando una caja
envuelta con una bolsa de polietileno.
El sujeto posteriormente pone la caja sobre la acera,
luego toma los servicios de un taxi y huye con destino desconocido. El robo se
produjo minutos antes de las 15:00 horas del último sábado 17 de noviembre.
Dos días después del hecho delictivo el ciudadano Koper Aguillas
Huillcahuaman (37), administrador de la entidad crediticia, interpone la
denuncia ante la PNP Cusco y entrega los videos en los que aparece el vigilante
que fue identificado como Amadeo Soria Antezana. Según las investigaciones
preliminares, se supo que Soria Antezana era un trabajador de confianza de la
cooperativa y, aprovechando esta condición, perpetró el millonario robo.
CLAVE DE LA BÓVEDA
El coronel PNP Julio Becerra, jefe de la Divincri, afirmó
que Soria Antezana tenía, incluso, la llave y clave de la bóveda de la
cooperativa.
Para la captura del sujeto, los agentes se desplazaron
hasta la ciudad de Abancay, capital de la región Apurímac (de donde es
oriundo). Antes de la llegada del equipo
policial Amadeo Soria se entregó ante la policía en Abancay y devolvió gran parte del dinero en la sede de Los Andes
de A de la capital apurimeña.
Becerra indicó que el hombre de seguridad de la
cooperativa no devolvió todo el dinero, ya que unos 25,000 fueron devueltos por
los padres durante el allanamiento de su vivienda; otros 6,000 soles faltan
devolver y dijo que los gastó, sin que precisar en qué.
Soria Antezana habría mostrado arrepentimiento y confesó
que lo hizo al verse tentado por el dinero y por necesidad. No obstante, es
investigado por el presunto delito de hurto agravado. Su caso está a cargo de
la fiscal Estela Rojas Enríquez, de la Primera Fiscalía Penal de Wanchaq. Cabe
precisar que habría sido el progenitor del sujeto quien le exigió devolver el
dinero que había hurtado. Ante la
exigencia severa del papá Amadeo se puso a derecho.
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